El sistema de transmisión de una bicicleta es el conjunto de componentes que permite transferir la energía generada por el ciclista al movimiento de las ruedas. Su funcionamiento se basa en una serie de engranajes y mecanismos que trabajan en conjunto. A continuación, te detallo los principales elementos y su función:
1. Pedales y bielas
Pedales: Son el punto donde el ciclista aplica fuerza con los pies.
Bielas: Conectan los pedales al plato y convierten la fuerza en un movimiento de rotación.
2. Plato y cadena
Plato: Es una rueda dentada unida a las bielas. Al girar los pedales, el plato mueve la cadena.
Cadena: Transfiere el movimiento del plato al cassette o piñones traseros.
3. Cassette o piñones traseros
Cassette: Es un conjunto de ruedas dentadas de diferentes tamaños montadas en el eje trasero. Determinan la relación de transmisión y, por tanto, la velocidad y el esfuerzo necesario.
Al moverse la cadena sobre los piñones, la rueda trasera gira y propulsa la bicicleta.
4. Desviadores (cambiadores)
Desviador delantero: Cambia la cadena entre los platos (en bicicletas con más de un plato).
Desviador trasero: Ajusta la posición de la cadena entre los diferentes piñones del cassette.
5. Mandos de cambio
Situados en el manillar, controlan los desviadores mediante cables o sistemas electrónicos. Permiten al ciclista seleccionar la marcha adecuada según el terreno o la velocidad.
6. Eje y ruedas
Eje trasero: Conecta el cassette a la rueda trasera.
Rueda trasera: Recibe la energía transmitida y la convierte en movimiento hacia adelante.
Funcionamiento general
1. El ciclista pedalea, haciendo girar las bielas y el plato.
2. El movimiento se transmite a la cadena, que lo lleva al cassette.
3. El piñón seleccionado determina el esfuerzo necesario para mover la bicicleta (marcha baja para subidas, marcha alta para velocidad).
4. La rueda trasera gira, impulsando la bicicleta hacia adelante.
Este sistema es eficiente y permite al ciclista ajustar la relación de esfuerzo y velocidad según las condiciones del terreno.